jueves, 6 de agosto de 2009

Uno que se parece a Cristiano Ronaldo se va de putas


Ayer puse la tele al tuntún (hace ya mucho que no tengo horas fijas para ver nada, desde que quitaron Pelotas) y apareció un intrépido reportero acechando a los puteros que salían de un club (no, uno de tenis no, uno de esos con luces de neón en los que se lee Olympo o Private). En un momento dado se fue a por uno que iba en un coche rojo (parecía un buga bueno, pero yo de coches, ni puta idea–nunca mejor dicho-). El caso es el periodista empezó a interrogarle, que si iba mucho por ahí, que si estaba casado… Y el otro (por cierto, no sé si se era clavado a Cristiano Ronaldo o es que ya estoy obsesionado, y es que es normal, nos ponen al portugués hasta en sopa, y lo que te rondaré morena, de aquí a unos meses va a ser una pesadilla, estará en los programas de fútbol -o sea en los telediarios-, en los de cotilleos, en los anuncios entre los programas de fútbol y los de cotilleos...), pero a lo que iba, el putero se ponía gallito, alardeaba, “¿Estás casado?”, le preguntaban, y respondía “Sí, sí”, “¿Y sabe tú mujer que vienes aquí?”, “Noooooo”, “Pero ahora estás delante de una cámara”, “Pues si se entera se tendrá que aguantar”… Después, salía derrapando y ya no volvíamos a saber nada de él, ni nosotros, ni supongo que el audaz reportero.

A lo que yo voy es que esos cuatro gruñidos deben equivaler a una autorización para que ahora todos sepamos que Cristiano Ronaldo se va de putas –bueno, él no, ese tipo del coche rojo que se le parece mucho-. Y mi pregunta es ¿si este hombre se pone tonto puede reclamar derechos de imagen, daños y perjuicios, un abogado gratis para los trámites de su divorcio? Yo de leyes, como de casi todo, no tengo ni idea, pero para mí que esta gente de la tele tira por el camino de en medio, "¿Cómo nos va a demandar ese mindundi?", se dirán. O igual hasta pueden hacerlo, sacarle ahí, o en otros programas en los que hablen sobre prostitución, con un subtitulo debajo que diga "Putero" (a la hija de un amigo la sacaron una vez en una foto de prensa durante un botellón y desde entonces cada vez que hablan sobre alcoholismo juvenil la vuelven a poner, y ahora todo el mundo piensa que es una borracha, aunque ella beba siempre -y aquel día también- solo mostos, o al menos eso le jura a su padre).

Otra cosa es que éticamente sea correcto utilizar ese tipo de imágenes. A mí el doble de Cristiano Ronaldo putero en realidad me da lo mismo -bueno, me da más bien repelús-, pero ¿ha pensado alguien, pensó el audaz reportero que lo entrevistó, por ejemplo, en su mujer?

miércoles, 5 de agosto de 2009

Españoles callejeando por el mundo

La teta de los programas de viajes con españoles por el mundo se está exprimiendo demasiado

El mundo está colonizado por españoles, por vascos, por madrileños… La mitad de ellos están en Chicago, Moscú, Manila (y la otra mitad en las playas, comiendo tortilla de patata de fiambrera o vaciando botellas de Moet Chandon en piscinas llenas de jamonas, chuloputas musculitos y de hijos díscolos de jeques árabes o de traficantes de armas, pero de eso ya hablaremos otro día)

Los reportajes sobre viajes proliferan, las cadenas se copian una vez más y al final todas echan el mismo programa. Ahora toca ver a gente que se ha ido a vivir a otros países y nos cuenta cómo es su vida allí y que echa mucho de menos el jamón.

Yo personalmente me quedo viendo esos programas con la boca abierta, creo que la fórmula engancha porque hoy la gente viaja más que nunca pero ve y aprende mucho menos de las ciudades y paises que visita, todo es una carrera para ir a los lugares fotografiables que luego enseñar para fardar un poco, sin mirar a los lados ni a la gente que está a los lados. Y en estos programas, por el contrario, hablan con gente que lleva ya meses o años viviendo en esos lugares por los que los demás pasamos de puntillas, y que ya saben de qué va la cosa. Eso sí, en ellos siempre tiene que haber un profesor de español, un cocinero de postín y uno que se ha forrado especulando con pisos o está a supersueldo de una multinacional, lo cual da un sesgo pijo al punto de vista (no se salva ni el profesor de español, que suele estar casado con una pintora que vende cada uno de sus garabatos a diez mil euros, si no ¿de qué vas a llevar viviendo diez años con erl sueldo del Instituto Cervantes en una ciudad en la que la mitad del año no se hace de noche y aún así los bares los cierran a las seis de la tarde?).

Son pues, estos programas, una apuesta segura para el espectador, que todavía mantiene la fascinación por el viaje (aunque sea un cagueta y luego cuando viaja se vaya a comer a un centro comercial, idéntico al de al lado de su casa), el gusto por la aventura, el morbo y el pasmo por ver a alguien zamparse un perro al alioli o disfrutando de una baja por maternidad de 2 años.

Y una bicoca, en realidad, estos programas, para las cadenas, pues mandan los equipos en plan paracaidista, no hay que investigar previamente, ni empaparse durante meses de la cultura y vida locales, para eso ya están los expatriados, el cocinero con estrella michelín, el director del centro de cultura español, la monjica navarra… y los de la tele solo tienen que dejarse llevar, rodar durante una semana y a casa a montar el invento. Un gran invento, sí, esto de los españoles por el mundo.

lunes, 3 de agosto de 2009

LAS ÚLTIMAS NOTICIAS DE VÍCTOR SANDOVAL


Este tipo o tiene mucha suerte o mucha jeta. Lo he visto en ese programa en el que todos gritan, La Noria, y siempre que conectan con él recibe o acaba de recibir una noticia de última hora. Igual es verdad porque se pone como una moto, gesticula, se le cambia la voz, parece que va a anunciar una primicia que cambiará el rumbo de la humanidad (y luego resulta que es que, por ejemplo, Michael Jackson tenía un hijo secreto -por cierto, yo de genética no entiendo mucho, pero ¿por qué los hijos de Michael Jackson parecen todos vikingos?...). Victor Sandoval, desde Miami, o cómo convertir un teletipo en una exclusiva.